Los calambres pueden resultar afecciones realmente dolorosas. Puede suceder que mientras estemos ejercitando nuestro músculo inmediatamente pare nuestra actividad, ya que el dolor punzante que aqueja es prácticamente imposible de desatender. ¿Cuáles son sus causas?
Podemos estar realizando una tarea sumamente sencilla y sin embargo sentir una presión que nos comprime, generando un dolor punzante e incómodo. En ese caso estamos ante un calambre. Esta sensación incómoda suele producirse en las piernas, aunque puede a aparecer en cualquier parte del cuerpo e imposibilitarnos seguir con nuestras actividades.
Los calambres: ¿de qué se tratan las contracciones musculares y en qué se diferencian de un tirón?
Los calambres musculares son contracciones producidas por el músculo cuando este se tensiona involuntariamente, es decir se contrae sin ninguna intención de que esto se produzca y no puede relajarse. Así de forma involuntaria el músculo se ve comprimido por un tiempo generando dolores agudos.
Estas contracciones musculares deben diferenciarse de un tirón por el hecho de que en los calambres, ningún músculo se ve dañado, distinto del segundo que implica un estiramiento o desgarro de las fibras de los músculos, lo que produce un dolor más persistente y que toma más tiempo de recuperación.
Las causas principales del calambre no son la fatiga muscular
Los causas principales de los calambres no son en sí la fatiga muscular si no la deshidratación. Cuando al hacer actividad física no se ingieren los líquidos suficientes, los nervios que llegan a los músculos se deshidratan y no atienden el suministro de sodio que necesitan, tornándose hipersensibles y contrayéndose involuntariamente.
Otras de las causas de los calambres son la fatiga muscular, así como la edad avanzada y las condiciones médicas pueden predisponer a las personas a experimentar espasmos musculares con mayor frecuencia. Para evitar su aparición los especialistas señalan que es crucial mantener una hidratación adecuada y asegurar un consumo suficiente de minerales, especialmente potasio, magnesio y calcio.